Cuando apenas hace tres semanas que se cerró la temporada truchera, los ríos de la provincia están sufriendo una importante crecida. Las lluvias, el viento y la aparición de las primeras nieves han vuelto a elevar los caudales a niveles considerables, que sin duda remitirán en los próximos días.

Con estas nuevas aportaciones los embalses, que finalizaron la campaña de riegos relativamente bien, han comenzado a almacenar agua que esperemos sea suficiente para asegurar los caudales estivales. El caudal de los ríos regulados quedaría así asegurado. La crecida actual tendrá un doble efecto sobre las poblaciones trucheras. Un efecto positivo en el sentido de volver a remover y limpiar los fondos. Lamentablemente éstos se habían colmatado a lo lago de todo el verano debido a la carga contaminante que soportan. El segundo efecto será también muy positivo para las frezas que ya están relativamente próximas.

«Por la concepción (8 de diciembre) la trucha en el fregón» dice el refranero leonés. Esta primera crecida va a mover las gravas y limpiar los frezaderos. En todo caso y salvo que la climatología empeore sustancialmente, el nivel de los cauces no es alarmante y puede calificarse de algo mas alto de lo habitual a principio de noviembre, si bien están por llegar todavía avenidas superiores.

Ley de Pesca

Una cuestión que preocupa a los aficionados a la pesca y que está suscitando un encendido debate entre los pescadores tradicionales y los partidarios de la pesca sin muerte, debate reflejado en varios foros de la red, es la publicación del borrador de la futura Ley de Pesca de Castilla y León. De no sufrir modificaciones en su debate parlamentario todas las zonas libres trucheras quedarán como tramos de pesca sin muerte. La posibilidad de poder pescar algunas truchas para su degustación posterior quedaría circunscrita a determinados cotos. De esta forma se pretendería preservar las poblaciones trucheras en las zonas libres, que no en los cotos, y se terminaría con una tradición que mantiene en la provincia la gran mayoría de las 45.000 licencias que se expiden. En todo caso habrá tiempo y lugar de comentar los pros y los contras de la futura Ley.